viernes, 12 de diciembre de 2008

Veterinario, parte 1

El veterinario empezó una vida totalmente nueva.
No se hubiera dado cuenta de que estaba enfermo, o al menos de que algo andaba mal, a no ser porque ayer a la tarde fue a poner la pava y se dio con que no encontraba ninguna pava. Tampoco bombilla ni yerba. Nada. No había nada que indique que alguien hubiera tomado mate antes en esa casa, su casa.